EL REY LEÓN (2019)

¡Hola amigos! ¿Qué tal estáis? Hoy os voy a hablar de una película que se estrenó el pasado 19 de julio: El Rey León. 
Como sabéis Disney ha decidido hacer remakes de sus películas más famosas, pero esta, sin embargo, es la más especial ya que la han hecho en forma de homenaje por los 25 años de la versión original homónima de animación del año 1994.
La película de Disney ha causado mucha polémica ya que ha sido acusada (de nuevo) de plagio a la serie japonesa de los cincuenta: El emperador de la selva y por la eliminación de los genitales de los todos los personajes. Pero debates aparte os voy a contar mi opinión sobre la película de Jon Favreau.
Yo, la verdad, no tenía muchas ganas de ver esta película, pero, sin duda me ha sorprendido, y aunque en algunos momentos me ha parecido un documental ya que a veces avanzaba demasiado despacio, pienso que merece la pena verlo solo por el trabajo de producción que ha llevado a cabo esta película, ya que ha sido producida únicamente por un ordenador gracias a la tecnología cinematográfica virtual, que también había usado (pero no de forma amplia como en esta película) en El libro de la selva. De hecho, solo para hacer posible la escena de la estampida tardaron tres años, ya que era complicado poner en el mismo escenario a cientos de animales y hacer que choquen entre sí. Me ha parecido una película graciosa, de hecho, en algunos momentos, he podido oír cómo los niños que se encontraban en la sala no podían parar de reírse, porque no hay que olvidar que es de género infantil, pero que sin duda la vas a disfrutar tengas la edad que tengas. Una cosa que me ha llamado la atención es que cada vez que había un cambio de escena siempre usaban la misma transición de disolución y creo que, por lo menos a mí, me ha resultado un poco cansado.

Lo que menos me ha gustado ha sido que han calcado (literalmente) la película original, y los momentos más emotivos lo eran por el simple hecho de que usaban la misma música de la original y porque te entraba mucha nostalgia al recordarla.
Pero, lo que más me ha gustado de la película es, sin duda, la batalla final no solo por la calidad de imagen de la escena, al poder verse tras ellos el pequeño incendio que habían provocado, sino porque también me parece la escena más importante de la película. Y otra cosa que le ha dado un punto a favor es que todo se producía al ritmo de la canción épica Battle for Pride Rock de Hans Zimmer.
En fin, es una película para todas las edades, que habla sobre la  amistad y el amor a la familia. Y me parece completamente recomendable, pero también es verdad que es muy (incluso demasiado para mi gusto) parecida a la original y en algunos momentos parecía que tenían los mismos diálogos. Pero, sin duda, es una gran película.

Alejandro Barbero.

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